Es una novela muy histórica por lo que la recomiendo sobre todo a los aficionados al género. Ha sido un placer encontrarme tantos nombres conocidos a lo largo de la narración: Prim, Serrano, Nandín, Isabel II, Alfonso XII y María de las Mercedes.
Es verdad que el toque policíaco la puede hacer apetecible a otro tipo de lector pero quienes más apreciaremos lo bien documentada que está, su calidad como reflejo de una época y una sociedad convulsas, seremos los aficionados a la novela histórica con un cierto conocimiento de aquella época. Se nota que hay un importante trabajo de documentación tras la redacción de esta obra pero, al mismo tiempo, el autor ha conseguido escribir una novela amena y entretenida que te mantiene en vilo que lees con ganas de ver cómo termina todo.